Inmensos cardúmenes se amontonan en nuestros mares poco profundos. Peces pequeños que a su vez alimentan a los más grandes. Las ricas aguas cercanas a la costa son las áreas de pesca de nuestro planeta y pueden aportar abundante alimento para la vida salvaje y para la humanidad. Los mares que bordean la tierra suponen menos de una décima parte de los océanos del mundo, pero el 90% de las criaturas marinas viven en las aguas costeras, desde los temibles tiburones hasta los humildes erizos. Proteger estos hábitats es una batalla que la humanidad debe ganar.
Lejos de la tierra, donde pocos de nosotros nos aventuramos, está el océano, más allá de la frontera de cualquier país, sin gobierno, salvaje y sin ley. Aventúrate en el profundo, oscuro y desolado océano que es el hogar de bellas y a veces extrañas criaturas.
El océano abierto es el espacio natural más grande del planeta, lejos de la costa y con muchos kilómetros de profundidad. Es un vasto desierto marino hay poco que comer y ningún sitio donde esconderse. Pero es el hogar de algunas de las criaturas más grandes y espectaculares de la tierra. En este episodio revelaremos lo que supone sobrevivir en este mundo salvaje e implacable. Seremos testigos de gestas de increíble resistencia, momentos de gran dramatismo y extraordinarios actos de sacrificio. Todo animal en el gran azul debe encontrar su manera única de sobrevivir.
La junglas ofrecen los hábitats más ricos del planeta, son mundos misteriosos donde animales extraordinarios intentan sobrevivir el lugar más competitivo de la tierra. Las selvas inundadas son el hogar para los jaguares cazadores de caimanes y los extraños delfines que nada entre las copas de los árboles, mientras que ranas ninja luchan contra avispa. El acrobático indri salta de árbol a árbol en Madagascar, mientras que la noche muestra hongos y extrañas criaturas que relucen en la oscuridad nunca antes filmadas.
El cuarto episodio sigue a las ballenas, tiburones, leones marinos, fragatas, delfines y albatros para revelar las estrategias que usan para cazar sus presas en el mar abierto. El océano es un inmenso desierto que cubre más de la mitad de nuestro planeta y en su mayor parte está deshabitado. Los predadores se enfrentan a una búsqueda sin descanso para encontrar comida, aunque aquí habitan algunos de los más destacables cazadores del planeta.