Antropologia y sociologia

Los humanos construyen su propio hábitat, diseñado para mantener fuera la naturaleza. Aunque descubriremos que el medio urbano es totalmente dependiente del mundo natural. Hay mucho en común incluso si vives en una casa en un árbol en Papúa Occidental o en una casa de ladrillos en Bolton. Filmaremos en un vertedero de Kenia, en un campamento a las afueras de Mombasa donde Ali, Ashe y su familia sobreviven entre la basura e incluso aquí, como en cualquier otro sitio, todo el mundo se toma un momento para el té

Desde lozanos bosques de nubes hasta cimas que te quitan el aliento, cuanto más alto escalas, más dura se vuelve la vida en una montaña. Planeta Humano explorará las extraordinarias maneras en que la gente sobrevive a extremas altitudes donde la naturaleza se muestra implacable. En las montañas Altai de Mongolia, los amplios espacios hacen de la caza algo casi imposible y por ello los nativos han forjado una increíble sociedad con las águilas, que pueden cazar para ellos. En las montañas Simien de Etiopía nos unimos a un joven que lucha contra los monos gelada por defender sus cosechas. En el Himalaya seremos testigos de un entierro del cielo. Cuando no hay madera para cremación ni se puede enterrar al muerto, se entrega a los buitres su cuerpo en una definitiva reverencia a la naturaleza

David Sampliner tiene 40 años, pero aún no siente que sea un hombre, un hombre de verdad. Cuando su mujer se queda embarazada, las inseguridades respecto a su hombría se profundizan aún más. ¿Cómo va a enseñar a su hijo a ser un hombre si se siente tan desapegado de sí mismo? Esta pregunta le impulsa a iniciar una búsqueda de su masculinidad que le va a llevar desde recibir clases de voz hasta un grupo de hombres que salen a cazar ciervos, y finalmente hasta su propio padre. 'Manual para ser un hombre' es un repaso íntimo, divertido y emotivo de lo que significa ser hombre y padre en el siglo XXI.

En la isla tropical de Mauricio se encuentra Melrose, una cárcel de máxima seguridad donde 800 de los peores traficantes de drogas, delincuentes sexuales y asesinos están encerrados. Todos los convictos son vigilados día y noche y hasta la más pequeña infracción conlleva un duro castigo.

En la última década, se mataron más delincuentes menores en Texas que en el resto del mundo completo. Norteamérica continua defendiendo su derecho de ejecutar a niños.