Sam Neill explora el futuro a largo plazo de la humanidad, un futuro donde haremos de otros mundos nuestro hogar mientras dejamos atrás la lenta pero inevitable muerte de nuestro Sol
Los océanos de la Tierra ayudan a convertir nuestro planeta en algo único en el sistema solar. Con los datos actuales, ningún otro lugar tiene la temperatura adecuada para el agua líquida, el ingrediente más esencial para la vida. Los océanos son la fuerza primaria estabilizante de la Tierra, y su inmenso poder ayuda a configurar la apariencia y el comportamiento del planeta y todo lo que vive sobre él. También son los grandes desconocidos, sus puntos más profundos han sido visitados menos que la superficie de la Luna.
Las órbitas son la dinámica que dirige el universo. Desde el asteroide más pequeño al más grande de los conglomerados de galaxias, todo en el universo está en órbita. Nosotros debemos nuestra existencia a la estabilidad de la órbita de la Tierra, nos dio la vida y nos mantiene seguros. Pero nosotros somos los raros. Por todas partes donde miramos encontramos órbitas caóticas, inestables y violentas. Más allá de nuestro sistema solar encontramos planetas calcinados, estrellas que se comen unas a otras y agujeros negros que destruyen todo en su camino". Aunque a gran escala las orbitas son también una fuerza creativa. Las galaxias cuando colisionan dan vida a nuevas estrellas y nuevos mundos. A escala galáctica las órbitas incluso constituyen el tejido mismo del universo.
¿Somos únicos en el Universo o hay otro planeta similar a la tierra en algún lugar del cosmos? ¿Es posible que Alpha Centauri, nuestra estrella más cercana sea hogar de otro planeta como la tierra? Los planetas del tamaño de la Tierra son difíciles de encontrar, pero los nuevos métodos de detección indirecta dan a los científicos bases para saber si hay cuerpos celestes puede haber en el universo similares a la Tierra. ¿Será muy difícil encontrarlos?
Muchos argumentan que los platillos volantes y otras naves extraterrestres visitan la tierra continuamente. Si fuera cierto, ¿Qué clase de tecnología requerirían tales naves alienígenas? ¿Concuerdan los informes de los testigos oculares con las modernas teorías de como sería posible un viaje interestelar?" Los astrónomos y los físicos teóricos ponderan diseños de equipos que anulan la inercia, naves de propulsión nuclear o por antimateria y motores de impulso por deformación. Basándose en las teorías de Einstein e incontables estudios científicos, descubriremos como estos visitantes podrían cruzar las inmensas distancias entre las estrellas. ¿Serían de carne y hueso o máquinas?