César persigue a Pompeyo a Grecia pero cambias las tornas y ahora él será el acosado. Tras recibir ofertas de Julio César, Pompeyo y Atia, Marco Antonio toma una decisión que lo lleva a reunir a los hombres de la 13ra legión para unirse a César. Mientras Lucio trata de salvar su matrimonio, Tito lleva el entrenamiento de Octavio a un nuevo nivel.
Sabiendo que los hijos de Lucio están vivos, Tito se dirige a encontrarse con él en la Galia, donde está sirviendo como soldado en el ejército de Marco Antonio. Espera llegar antes de la batalla contra Octavio, pero llega demasiado tarde. Pero encuentra a Lucio vivo y juntos se dirigen a encontrar a los niños. El victorioso Octavio planea su vuelta a Roma. En Turquía, Bruto y Casio amasan su propio ejército.
Lucio controla el Aventino con el terror, enemistándose con los otros capitanes de bandas. Los intentos de Tito para poner sensatez son interpretados como desobediencia, creciendo la tensión entre ambos hasta llegar al enfrentamiento. Atia convence a Marco Antonio a que se haga gobernador de Macedonia tras su periodo como cónsul, pero ve cómo sus planes descarrilan tras el manifiesto de Cicerón al Senado.
Con la derrota de la flota egipcia, Marco Antonio y Cleopatra se retiran a su palacio en Alejandría y esperan su destino. Creyendo que Cleopatra se ha suicidado, Marco Antonio la sigue a la otra vida. Sin embargo, ella tiene otros planes y se prepara para negociar con Octavio. Al darse cuenta de que Octavio la tomará presa para exhibirla, recurre a un áspid para quitarse la vida, no sin antes confiar a su hijo Cesarión a Lucio. Octavio envía a Tito en su busca. Los dos viejos amigos pronto se encontrarán.
Mientras César evalúa la oferta de Pompeyo, Marco Antonio insiste en ir a la guerra. Lucio se ve obligado a reconsiderar su carrera como hombre de negocios. Tito es contratado como tutor de Octavio, pero el soldado también aprenderá varias lecciones del ingenioso joven. Atia planea como obstaculizar la relación entre César y Servilia.
Mientras Lucio trata de salvar su matrimonio, Tito lleva el entrenamiento de Octavio a un nuevo nivel.