'Cada concierto es distinto. Cuando se apagan las luces, las vidas de 30.000 personas coinciden... en ese instante. Todo el mundo que está ahí trabajando o mirando está viviendo ese momento. Es cuando estamos todos de acuerdo sobre lo que estamos haciendo a la vez... así que es una sensación maravillosa de unión cargada de posibilidades. Y entonces es cuando me sube la adrenalina... y empiezo a boxear con mi sombra a lo Rocky y cosas por el estilo. Así que me entusiasmo tanto como el que más. Y todavía siento el mismo entusiasmo cuando voy a conciertos de otra gente. Me encanta ese momento. Y después hay que intentar mantener esa energía durante hora y media... porque se puede evaporar si no tienes cuidado. Aunque quizás no esté bien visto... emocionarse porque la gente venga a escuchar tu música... no nos importa una ***, nos encanta y, bueno, es emocionante'.
Así que me entusiasmo tanto como el que más. Y todavía siento el mismo entusiasmo cuando voy a conciertos de otra gente. Me encanta ese momento. Y después hay que intentar mantener esa energía durante hora y media... porque se puede evaporar si no tienes cuidado. Aunque quizás no esté bien visto... emocionarse porque la gente venga a escuchar tu música... no nos importa una ***, nos encanta y, bueno, es emocionante'.